Olía a hierba. Se estiró en la cama mientras respiraba la primera bocanada de día nuevo. Enseguida lo notó, como un breve aroma. Un acuerdo tácito entre el universo y ella, hizo que este la despertara para que oliera la… Seguir leyendo →
Descubrió que podía ser feliz. Todo el tiempo que había permanecido encerrada pensó que la vida era así, una serie de desgracias. Tan acostumbrada estaba que sospechaba que algo iba mal cuando todo iba bien. Pero un día, de esos… Seguir leyendo →
Los caminos siempre me condujeron a ti. Y aunque el amor fuera eterno, la vida desató ese hilo que nos unió. Llegué a Hydra para beberme la vida y me convertí en tu banquete. Me convertí en la sangre que… Seguir leyendo →
Contemplaba su cuerpo desnudo cada mañana. Pocas veces holgazaneaba en la cama. Se levantaba impetuosamente, como si se le hiciera tarde para seguir viviendo. En esa batalla ganada contra el dormir era cuando ella la miraba bajo la protección de… Seguir leyendo →
El olor penetrante a mar, a algas, a criaturas marinas invisibles a los ojos humanos le recorrió todo el cuerpo descubriéndose que había estado dormida durante todo el invierno. La hibernación había sido tan larga que había olvidado cómo caminar,… Seguir leyendo →
La luz del sol entraba por la ventana como de costumbre. Puntual, como siempre. Eterna, hasta que dejara de serlo. Se volvió a acomodar en el sofá y desde su tumbada posición volvió a cerrar los ojos para seguir soñando…. Seguir leyendo →
Perdida la esperanza y la ilusión por lo que está por llegar. Sin deseo salpicando el cuerpo. Con el alma apagada como el cadáver que yace esperando la resurrección. Sólo con los recuerdos brillantes que atormentan por su vivacidad, por… Seguir leyendo →
Pasaban los días sin marcar ningún minuto exacto. El calor asfixiante de una ciudad reducida en tamaño la habituaron a vivir en la penumbra de su casa. Persianas semibajadas proyectaban finos rayos de sol en el suelo. Los suficientes para… Seguir leyendo →
Descendió por la primera calle en la que descubrió el olor a mar. Fijó la vista en el horizonte y descansó un instante apoyando la mano en la blancura de una pared mediterránea. Respiró hondo, lo intentó al menos, y… Seguir leyendo →
La tarde empezó como siempre. Bueno, más que la tarde la siesta. Ese espacio de tiempo más anfibio que otra cosa, entre la vida viva y el sopor de un sueño que no es el nocturno. En ese tiempo de… Seguir leyendo →
El tiempo quedó suspendido entre un columpio que nadie empujaba. A la espera de un soplo de viento que lo agitara, que lo meciera, que lo llevara. En el rincón oscuro de cada hogar moría inerte la vida cotidiana, el… Seguir leyendo →
Me siento frente a ti, como si el mundo se redujera a estas cuatro paredes de tu habitación. Y descanso como si hubiera regresado de un mundo distinto, ajeno al único mundo que existe. ¿Es un refugio o es otro… Seguir leyendo →
Llega la noche, a galope, con cascos de acero irrumpe como rey, como dios, y cada noche es la última noche, la esperanza de ver la última noche. Camino hacia ella, pero volverá a pillarme desprevenida. El camino es lento,… Seguir leyendo →
Hasta en el silencio deseo estar cerca de ti. Ser yo cerca de ti es lo que me descubre que eres tú. Mi camino, mis pasos, el sendero que quiero seguir transitando,. Desde el silencio te escribo. Mientras, mi mente,… Seguir leyendo →
Hay un tiempo, un momento para cada cosa. Una hoja que cae con el peso del polvo que se deposita. Una semilla, un todo que comienza y acaba en cada momento. La eternidad no es más que saltos de gorrión… Seguir leyendo →
El tiempo se resistía en avanzar. Pasaba el tiempo mirando su reflejo en el monitor apagado del ordenador. Permanecía en el más absoluto silencio. Concentrada en esa mirada perdida que se devolvía a sí misma en el espejo de la… Seguir leyendo →
Se escabullo de la muchedumbre y se adentró en un callejón de silencio. Sonaba la última melodía en su mente que impertinente le hacía tararear sin querer. El suelo estaba húmedo de una lluvia helada, triste, negra. Caminaba con el… Seguir leyendo →
Subí casi sin detenerme la cuesta hasta la ermita. Adoquinada y resbaladiza me obligó a concentrarme en la ascensión, respirar y seguir subiendo. Con cada inhalación no sólo tomaba aire sino que me llenaba de los aromas más cercanos. En… Seguir leyendo →
Escucha: Haré para ti un jardín de rosas, y de mimosas, y salpicaré de violetas un sendero que te conduzca hasta mí. Me encontrarás, porque jamás me esconderé y porque siempre estaré al final de cualquier camino. Renacerás de nuevo… Seguir leyendo →
Un faro era lo único que veía noche tras noche, un resplandor que iluminaba un infinito oscuro, sonoro, azul pintado de negro. Soñaba con aquel paisaje sin haberlo visto nunca. Se levantó como cada mañana en su ciudad seca de… Seguir leyendo →
Vivir para recordar. Así siento mi vida en estos precisos momentos. Ahora que ella se ha ido, que ha cerrado la puerta. Ahora que me ha dejado con mi soledad. Vivir para recordar… No había duda de que llegaría el… Seguir leyendo →
Aprendió a reconocer a las personas por su rostro, más bien por sus ojos. Los ojos delataban de las que te podías fiar y de las que no. Los ojos no eran sólo el espejo del alma sino la clave… Seguir leyendo →
Había una vez una niña de tez clara como el brillo de la luna de verano que vivía feliz en una casa frente al mar. Por las tardes salía con un cubo viejo de latón y caminaba a los pies… Seguir leyendo →
Se perdió en la penumbra, en la niebla gris que envolvía el espacio inhabitado. Se escabulló entre las sombras, cruzó el puente, el camino, el aire, las espinas y el bosque. Arrancó a tiras el traje, la ropa, los zapatos…. Seguir leyendo →
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